¿Me quedaré sin óvulos si dono?
Esta semana, a propósito de la invitación a chicas jóvenes para que fueran donantes de óvulos, se generó en la red una pequeña polémica.
A pesar de que la información que fluye por internet , explica abundantemente el mecanismo por el que se seleccionan los óvulos, alguna persona afirmaba que en los ciclos normales se producía un solo óvulo y que con las estimulaciones se producían muchos más, con la consiguiente disminución del caudal de óvulos restantes.
Esta es una preocupación que se extiende también entre las pacientes que realizan varios ciclos de estimulación para uso propio. En ocasiones les hemos transmitido que su reserva ovárica está disminuida y parece lógico pensar que, siendo así, si provocamos ovulaciones múltiples, disminuiremos aún más esa reserva, y que incluso podríamos acelerar la presentación de la menopausia.
En realidad esto no es así. La dotación ovocitaria de cada mujer está determinada desde que era un embrión, y nunca será capaz de agotarla mediante las ovulaciones ni por más estimulaciones que hagamos. El problema en la baja reserva y en las menopausias precoces es que se inicia precozmente en el ovario un proceso , mediante el cual se atresian antes de hora todos los ovocitos restantes.
En el ciclo normal de una mujer, cada mes, inician un proceso de maduración entre 5-15 folículos primordiales (en cuyo interior habrá un óvulo), y ya en los primeros días uno se convertirá en dominante, haciendo que los demás se atresien. Lo que pretendemos con los tratamientos de fecundidad es aprovechar todos esos ovocitos que habitualmente se pierden por el camino cada mes, sin menoscabar el resto de la reserva de la mujer.
En la actualidad se trabaja con una nueva teoría que habla de la posibilidad de que haya una segunda oleada de folículos dentro del mismo ciclo menstrual. Por ello se están desarrollando prometedores protocolos de estimulación que aprovecharían otro conjunto de ovocitos, que en otro caso se perderían para siempre.